no puedes malgastar.
aunque quieras.
eres fácil como ir a casa.
haciendo sangría llena de rojo, haciéndola manchando las manos y estallando burbujeando en el techo hasta irse a dormir.
hasta quedarse colgando como el aire subiendo encima de los fritos, pescados, papas, carne y aceite
13 dic 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)